GT-VoA implanta el piloto de la Cacuriá y planea futuro

- 24/09/2014

Para muchos, Educación a Distancia (EaD) es sinónimo de un conjunto de textos y presentaciones. Si depende del GT Servicio de Video bajo Demanda como Objetos de Aprendizaje (GT-VOA), la enseñanza a distancia será más dinámica e interactiva. Desde mediados de 2013, el grupo desarrolla una plataforma que busca permitir objetos de aprendizaje (OAs) con contenido multimedia y participación activa del usuario.

Implementada en la primera fase del proyecto, la herramienta de autoría Cacuriá posibilita que los profesionales de educación creen objetos de aprendizaje sin la intermediación de un programador o diseñador. A través de un proceso de creación intuitiva, proyectado y concebido por el propio profesor, es posible crear un objeto con contenido multimedia adicional, por imágenes, audio, textos, etc.

Actualmente, en la segunda fase del programa, el grupo está implantando el piloto del Cacuriá en instituciones socias como, por ejemplo, las universidades federales de Juiz de Fora (UFJF) y de Maranhão (UFMA), además de la propia RNP, a través de la ESR.

“El Cacuriá fue creado por un proceso de diseño participativo, en que diversos posibles usuarios nos ayudaron con sus percepciones. Y, de cierta forma, la herramienta es probada continuamente y ninguna nueva funcionalidad es aprobada sin pruebas con usuarios”, afirmó el coordinador del proyecto, Carlos Salles, profesor de la UFMA.

El principal reto del GT es integrar la solución a los servicios de video y videoclases actualmente ofrecidos por la RNP. Además, según Carlos Salles, la visión de futuro involucra la evolución para una herramienta de autoría aún más rica, que promueva la concepción de contenido multimedia de una forma simple y ofrezca igual atención a cómo el alumno consigue ver este contenido.

“Visualizamos un escenario futuro en que el profesor pueda concebir su contenido y proporcionarlo no solamente a sus alumnos, sino a cualquier otro espectador, con la misma facilidad. Creemos también en la posibilidad de que profesores compartan entre sí proyectos de objetos de aprendizaje de tal forma que ellos puedan ser construidos en coautoría o incluso colaborativamente”, afirmó.